La característica “cristal” que se le atribuye al concepto habla de la fragilidad o la manera en que quedan “rotos” por dentro si algo no les sale como ellos deseaban. El análisis que se hace en torno a estos jóvenes dice que son así de inestables o inseguros porque sus padres, que vivieron épocas de mucha carencia, se empeñaron en salir adelante para darles todo y que nos les falte nada como a ellos en su momento.